Normalmente los excedentes siempre se pueden colocar a familiares y amigos, pero en ocasiones todo y así por lo bien que nos lo hemos currado, por suerte o por lo que sea tenemos un excedente de producción desmesurado.
Que podemos hacer con la producción que nos sale por las orejas?
En esos mercados que por aquí son una vez al mes en cada localidad, pero repartiéndose los fines de semana de manera que no se molesten uno con otro, la base de estos mercados es que no se puede revender, osea, poner a la venta ninguna cosa que hayas comprado para llenar la paraeta, son unos mercados variopintos de productos de la huerta, artesanía, y de elaboración casera/artesanal, en los que se comparten los métodos de producción y elaboración y asequibles para los que exponen sus productos, ya que no hay un volumen de ventas muy elevado, pero suficiente para aportar un cantidad para las atracciones que se traen, talleres, música, ludoteca para los pequeños y por su carácter lúdico/festivo los ayuntamientos suelen prestar el espacio sin gravar con ningún tipo de tasas ni requisitos fiscales.
Recientemente y por la expansión de este tipo de mercados les Corts Valencianes han elaborado un ley que regula el comercio de cercanía de pequeños productores que nos exime de algunos requisitos para la venta del,producto y sus elaboraciones primarias tanto fiscales como sanitarias.
Claro que siempre se puede ofrecer dependiendo de la cantidad de excedentes a un bar o restaurante pero ahí ya le hacemos la competencia desleal a los comerciantes que pagan sus impuestos, por lo que se hará si existe confianza con el propietario y seria como si se vende a un amigo.
También están las cooperativas integrales que son cooperativas alternativas que incluso las hay que tiene su moneda de intercambio propia que se merecen un articulo entero por la labor social que realizan.
